No estamos en Alabama en los años cincuenta, ni en el SouthAfrica de la apartheid, sino hoy en Italia, en una ciudad gobernada por el centro-izquierda. El mismo trayecto, el mismo servicio municipal de transporte público, pero autobuses y paradas distintas: uno para los italianos, el otro para los extranjeros.
El alcalde Orazio Ciliberti declara: "No hablemos de racismo, sino de unaoportunidad de crear un servicio mejor. (...) A la base de la decisión están las fricciones entre inmigrantes y residentes de Borgo Mezzanone".
El autobus va de Foggia al pueblo-barrio de Borgo Mezzanone, donde hay un centro de primera acogida. Los extranjeros que viven en el centro o lo frecuentan son más numerosos de los habitantes del pueblo, y la situación de la convivencia a veces es conflictiva.
Sin embargo, hay que añadir que en este mismo pueblo la ong Medici Senza Frontiere organiza un presidio sanitario para los sinpapeles, y que en esta zona la explotación de mano de obra "en negro" en el sector agrícola alcanza gravísimos niveles de violación de derechos humanos. Muchos trabajadores extranjeros, a veces clandestinos pero también neocomunitarios, son víctimas de abusos y hay casos de personas asesinadas o desaparecidas.
El presidente de la region Puglia ha protestado y pide que la guagua "para extranjeros" sea abolida inmediatamente. Acsi, la asociación de las comunidades extranjeras en Italia, en Foggia presidida por el tunecino Habib Ben Sghaier, expresa su perplejidad : "La integración no se hace así. No puedo creer que la prefectura haya avalado semejante decisión".
El correo electrónico del alcalde de Foggia es: sindaco@comune.foggia.it
¿Por qué no le escribimos nuestras opiniones sobre el asunto?
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